¿Merece la pena pagar para entrar a la Catedral de San Pablo en Londres? El ícono de la capital británica es una visita de lo más interesante, pero quizás te preguntes si te compensa pagar su entrada. En este post queremos sacarte de dudas y además, darte toda la información útil para que puedas planear tu visita sin tener que preocuparte por nada. ¡Empezamos!
Un poco de historia: conoce los secretos de la catedral de San Pablo
Para empezar, vamos a hablar un poco de la ubicación en la que se encuentra la Catedral de Londres. Este lugar ha sido el hogar de más edificios religiosos aparte de esta construcción. Todo empezó con un dolmen, al que siguió un templo griego, que luego fue reemplazado en el año 604 por la iglesia más antigua de Inglaterra hasta llegar a San Pablo. La catedral se construyó entre los años 1676 y 1710, el encargado de hacer esta obra maestra realidad fue Sir Christopher Wren, el arquitecto de muchos edificios de La City.
Desde su construcción, esta catedral ha sido testigo de algunos de los acontecimientos más importantes del país. Aquí se celebró el funeral de Winston Churchill o la boda del príncipe (actual rey de Inglaterra) Carlos y la princesa Diana, entre otros. ¿Quieres conocer algunas curiosidades antes de visitar la Catedral de San Pablo? Sigue leyendo, que te las contamos.
La cúpula de la Catedral de San Pablo está formada por tres en realidad: la exterior, que es la que podemos ver y la más atractiva de todas; la interior, que se puede ver desde dentro; y una que está en la parte media que no es visible desde ningún lugar, ya que solo sirve para soportar el peso de la estructura.
San Pablo es una de las atracciones de Londres más importantes, pero sus campanas no se quedan atrás, ¿sabías que tienen nombre propio? Great Paul, que tiene 16,5 toneladas, es la campana de iglesia más grande de todo Reino Unido, y tiene una amiga fiel: Great Tom, que cuenta con 5 toneladas. No suelen hacer que repiquen, solo en momentos muy importantes, como por ejemplo, la muerte de miembros de la monarquía.
Información práctica
Ahora vamos a lo importante, ¿cuánto cuestan las entradas de la Catedral de San Pablo? ¿En qué horarios se puede entrar? Respondemos a todas estas preguntas a continuación.
Precios de entrada
- Adultos: 31 €. Puedes comprar directamente las entradas en este enlace para poder evitar las colas si vas en temporada alta o en días que pueda haber más afluencia.
- Estudiantes y mayores de 65 años: 28 €.
- Niños de entre 6 y 17 años: 12 €.
- Familia de 1 adulto y 2/3 niños: 43 €.
- Familia de 2 adultos y 2/3 niños: 74 €.
Si tienes pensado coger la tarjeta turística London Pass ten en cuenta que esta atracción está incluida.
Horarios
La catedral abre de lunes a sábado de 08.30 a 16:30, ya que a las 17:00 todos los días se hace un servicio religioso.
Cómo llegar
¿Cómo llegar a la Catedral de San Pablo? Hay diferentes opciones, dependiendo de la hora y de donde vengas, te compensará más una que otra.
- Andando: si estás haciendo una ruta por La City te recomendamos que vayas hasta este monumento paseando, así, podrás disfrutar de la vida de este barrio e ir encontrando pequeños rincones.
- En metro: la única línea que llega directa es la Central Line, parada Saint Paul’s.
- Autobús: llegar en los clásicos autobuses rojos de dos plantas de Londres es una experiencia en sí. Las líneas que llegan son: 4, 11, 15, 23, 25, 26, 100 y 242.
Qué ver dentro de la catedral
En la Catedral de San Pablo hay diferentes zonas que vas a poder ver, ya que todas ellas están incluidas en tu entrada. Antes de explicarte detalles de cada una, tenemos que decir que para subir a las diferentes galerías hay que hacerlo subiendo más de 500 escalones (para llegar a la parte de arriba), no hay que tener una forma física excelente, pero sí que se hace bastante cansado. ¡Empezamos el tour por uno de los monumentos de Londres más icónicos! Y recuerda, ¡tenemos un vídeo de YouTube con la experiencia completa!
La nave principal
La nave central es lo primero que vas a ver cuando entres a San Pablo. Con un pasillo central increíble, tiene todo tipo de detalles, de hecho al principio resulta un poco abrumador. En la parte de la izquierda podrás ver un monumento que homenajea al Duque de Wellington.
Una de las partes más impresionantes, es sin duda el altar. Es de 1958 y se hizo en mármol y roble, el diseño partió de unos bocetos que en su momento había hecho Sir Wren, esto fue necesario porque en la Segunda Guerra Mundial el anterior quedó completamente destruido. Justo detrás puedes ver la Capilla de Jesús y la zona del coro, en la que se sitúa el trono del obispo.
Tampoco podemos olvidarnos del órgano, se colocó en el año 1695 y es el más grande de todo Reino Unido. Para que te hagas una idea, tiene la friolera cantidad de 7189 tubos. Lo mejor es que recorras toda esta zona con calma, fijándote en las capillas de los laterales y por supuesto, en los frescos del techo.
La galería de los susurros
Después de los primeros 257 escalones, llegarás a la galería de los susurros, para nosotros una de las partes más impresionantes de toda la visita.
Su nombre se debe a la acústica que tiene, si te pones en un punto y otra persona se pone justo en el opuesto, solo tendrás que hablarle a la pared para que te escuche. Nos pareció muy curioso cuando nos enteramos de que para visitar este lugar ha sido necesario pagar entrada desde el siglo XVIII. No se pueden sacar fotos ni grabar en esta zona, pero casi mejor, así te llevarás una sorpresa aún mayor.
La galería de piedra
Subiendo otros 119 escalones llegarás a la galería de piedra, el primer mirador situado en el exterior de la cúpula de la Catedral de San Pablo. Desde él podrás ver algunos de los monumentos más famosos de la ciudad, nos hizo mucha gracia ver la Tate Modern y el Puente del Milenio, ya que siempre habíamos estado en el lado contrario de las vistas.
La galería dorada
¡A seguir dándole a las piernas! Después del último tramo de escalones con 152 nada más y nada menos, estarás a 85 metros de altura y podrás disfrutar de unas de las mejores vistas de Londres. Desde aquí verás el London Eye, el Sky Garden, Shard y mucho más. Es una zona pequeña, un poco estrecha y circular, en la que podrás pasear admirando lo bonita que es desde las alturas la capital británica.
La cripta
La cripta de la Catedral de San Pablo es un punto muy interesante de la visita. En ella se conservan algunos fragmentos de los anteriores templos, una gran cantidad de monumentos y memoriales y los restos de personajes muy importantes de la historia del país, entre ellos el Duque de Wellington, Winston Churchill y el Almirante Nelson.
Consejos prácticos para tu visita a la catedral de San Pablo en Londres
Unos tips no le vienen mal a nadie, ¿verdad? A continuación te vamos a dar algunos consejos para visitar la Catedral en San Pablo que a nosotros nos hubiese gustado saber antes de ir.
- Audioguía: con tu entrada, está incluida la audioguía, no te olvides de cogerla. La dan justo después de entrar en un pequeño mostrador. Así, podrás enterarte de un montón de datos y curiosidades de las diferentes zonas de la Catedral.
- Tiempo a dedicarle: no queremos que pagues la entrada y no te dé tiempo a verlo todo. Nuestro consejo es dedicarle un mínimo de 2 horas, así, podrás ir con calma y disfrutarlo al máximo.
- Entrada impresa: si vas a llevar la entrada ya cogida, lo mejor es que la lleves impresa en papel, es obligatorio presentarla así, y aunque te dan la opción de mandarles un correo electrónico e imprimírtela ellos, es mucho más sencillo tenerla ya contigo y sobre todo, más rápido.
- Escaleras: no queremos acabar este post sin hablar de las escaleras que hay que subir para llegar a las galerías. El primer tramo es normal y no es un problema, pero los siguientes son en forma de caracol y hay zonas bastante incómodas, las personas con problemas en las rodillas, por ejemplo o falta de forma física, puede que lo pasen un poco mal. Además, en el último tramo hasta la galería dorada, las escaleras son muy verticales y quizás no sean aptas para personas que tengan mucho vértigo.
- Orden de la visita: nuestra recomendación es que empieces por la nave central, subas a las galerías y luego ya bajes a la cripta y salgas por la zona de la tienda.
Experiencia personal: ¿merece la pena pagar la entrada?
Y llegamos al final, ¿merece la pena pagar la entrada a la Catedral de San Pablo? Por supuesto, ten en cuenta que esto es nuestra opinión personal, y que no tiene por qué ser igual para todo el mundo.
Para nosotros, es un SÍ absoluto, nos parece uno de los monumentos más impresionantes en los que hemos estado, y teniendo en cuenta que seguramente sea uno de los mejores miradores de la ciudad, nos parece que sí que compensa pagar y vivir la experiencia. Eso sí, nos aseguraríamos de ir en un día que haya visibilidad, porque si no, si que puede que la visita pierda un poco.
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