Uno de los grandes atractivos de la ciudad de Marrakech son las grandes opciones que ofrece su entorno. Desde Casablanca a paisajes naturales de ensueño, tendrás donde escoger. En nuestro caso elegimos el Valle de Ourika, en concreto su cascada, para nuestra excursión desde Marrakech. En este post te contamos todos los detalles y nuestra opinión sobre ella.
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Excursión al Valle de Ourika
Se trata de una de las excursiones más populares debido a la cercanía a la ciudad. En apenas 65 kilómetros y un par de paradas intermedias podrás disfrutar de las cascadas del río Ourika en la población de Setti-Fattma.
La excursión la cogimos online, estando ya en Marrakech, mediante ClickExcursions y nos costó 12 € por persona. Cuando estés en la ciudad comprobarás que existen infinitas empresas que prestan estos servicios. En tu hotel tendrán una y paseando por las calles descubrirás un montón de locales que se dedican a ello.
Si apuestas por desvirtualizar la compra podrás negociar y conseguir precios mejores que los que te ofrecerán a la primera. Eso sí, te requerirá algo más de tiempo y unas cuantas visitas. También puedes contratarla con Civitatis para más comodidad, pero es algo más caro.
La salida es desde tu hotel, si es accesible, o en un punto de encuentro como el Café de France o la puerta Bab Agnou en función de la ubicación de tu Riad. Viajamos en un minibús bastante cómodo con un guía que hablaba español.
La alfarería, la primera parada
Antes de adentrarnos en el Atlas, la cordillera más grande de África, hicimos una parada en una alfarería tradicional. Fue bastante interesante descubrir como trabajan el barro, el alfarero nos contó todos los pasos del proceso y realizó una pequeña demostración. Uno de los puntos que más nos llamó la atención fue el horno para cocer las piezas.
Por supuesto, cuentan con una tienda para comprar una gran variedad de objetos fabricados en el taller. Tienes donde elegir entre platos, tagines, cuencos o figuras. El precio tendrás que negociarlo, aunque parecía algo más barato que en la ciudad.
El mirador, las vistas al Atlas
Nada más adentrarnos entre las montañas tocaba otra nueva parada, en este caso un mirador junto a la carretera para disfrutar de las vistas a las montañas. Fue una gran toma de contacto con la cordillera y, el lugar perfecto para hacer unas fotos. Apenas nos detuvimos unos 10 minutos antes de continuar el trayecto.
La cooperativa de aceite de argán
Tras cruzar las montañas y adentrarnos en el valle del río Ourika llegó la última parada antes de nuestro destino. Se trataba de una cooperativa dedicada a la elaboración de productos con aceite de argán. Este cultivo, junto a la aceituna, es el más habitual de esta zona.
Tras una breve, pero interesante explicación sobre este fruto, sus partes y los usos que le dan a cada una, te invitan a pasar a la tienda. Allí, nos ofrecieron un té con pan acompañado de aceite y una crema elaborada con cacahuetes y argán que estaba muy sabrosa.
Mientras disfrutábamos del tentempié aprovecharon para hacer una presentación de los diferentes artículos de cosmética que elaboran y que también pudimos probar. La verdad es que no se hizo demasiado largo y tras un vistazo a los productos volvimos a la carretera.
La ruta por el valle de Ourika
Llega el punto fuerte de la excursión, las cascadas. Esta zona cuenta con siete, pero en el recorrido solo verás dos de ellas. El resto son de difícil acceso y quedan fuera de la ruta. Lo primero que tienes que saber es que no es un paseo, se trata de un trekking, sencillo, pero con algún pasaje entre rocas donde te va a tocar apoyar las manos. Por ello, te recomendamos que lleves calzado cómodo.
Una vez allí, realizamos una ruta circular de hora y media desde la población de Setti-Fattma. En el primer tramo bordeamos el río hasta la zona de las cascadas. Al tratarse de una excursión popular hay bastante gente, así que ármate de paciencia para lograr unas fotos bonitas.
Tras la parada en la cascada tocó volver a caminar, en este caso, por las montañas. Sin duda, este tramo nos gustó más que el de subida. Había menos gente y el árido paisaje del Atlas nos pareció precioso. Eso sí, cuenta con una zona de desfiladero poco apta para personas con vértigo. Aunque la verdad sea dicha se lleva bien, Sandra tiene cierto miedo a las alturas y la pasó sin problemas.
Durante toda esta visita nos acompañó un guía local que estaba incluido en el precio. Hablaba español y estuvo en todo momento pendiente del grupo en las zonas más complejas del camino, especialmente de la parte patosa de este blog, puedes hacer tus propias conjeturas 🤣. Así que, al acabar le dimos propina cuando la pidió, se la había ganado… ¡con creces!
El restaurante, para disfrutar del río
Por último, antes de volver a Marrakech hay que reponer fuerzas y comer. La zona está llena de restaurantes a la orilla del río. Nos dirigieron a uno en concreto, Restaurante Vallee, pero no te preocupes son todos similares y con el mismo precio.
Puedes elegir entre un menú (entrante, plato y postre) de 120 dh o platos sueltos que valen unos 70 dh, la bebida es siempre a parte. Al terminar te invitan a un té con menta y tienes un ratito para disfrutar del entorno y escuchar el sonido del río. La comida no nos gustó demasiado, las carnes estaban bastante secas y poco sabrosas, pero comer junto al río es una experiencia muy agradable.
- Tagine de kefta: 70 dh
- Brochetas de pollo: 70 dh
- Agua con gas: 15 dh
Una vez terminada la comida llegó el peor momento de la excursión. Nos dieron una hora y media de tiempo libre, pero en la zona no hay nada más que hacer, solo hay restaurantes y un par de tiendas. Algunos de los que nos acompañaban se echaron una siesta y otros dieron vueltas por la carretera. Nos pareció una pérdida de tiempo totalmente evitable, el trayecto de vuelta duró una hora y media.
En nuestra opinión la excursión merece la pena. Las dos paradas son entretenidas y en ningún momento nos agobiaron para comprar y pudimos ver las tiendas sin problemas. La zona de las cascadas es preciosa, el recorrido se hace ameno y descubres unos paisajes bastante interesantes y diferentes. En cuanto a lo peor, la comida y la espera antes de emprender la vuelta. El precio es bastante bueno, así que, te la recomendaríamos si quieres realizar esta visita.
Otras excursiones de un día desde Marrakech
Marrakech es una ciudad que se ve con facilidad, de hecho tenemos una ruta para que la descubras en un día por si tienes poco tiempo. Para el resto de tu estancia puedes elegir alguna de las excursiones que te proponemos.
Excursiones de un día
Estas opciones te permiten disfrutar de un día diferente y volver a dormir a la ciudad. Existen un gran número de empresas que se dedican a ello y podrás encontrar diversos precios. Estas son las que barajamos nosotros durante nuestra estancia antes de decidirnos por el Valle de Ourika.
- Cascadas de Ouzoud: situadas a unas dos horas y media de Marruecos podrás descubrir las cataratas más altas del norte de África con 110 metros de altura. Además, podrás hacer frente al calor bañándote en el río.
- Precio por persona: 30 €
- Essaouira: esta localidad costera está a casi tres horas. Conocida como la Perla del Atlántico, es un pequeño pueblo pesquero que cuenta con una preciosa fortaleza. También podrás disfrutar de su gastronomía a base de pescado.
- Precio por persona: 35 €
- Casablanca: se trata de la ciudad más poblada de Marruecos y se encuentra a unas dos horas y media en tren (estación Casa Voyageurs). Su principal atractivo es la Mezquita de Hassan II, la segunda más grande del mundo.
- Precio del tren por persona: 25 €
Excursiones de varios días
Otra de las opciones que tienes es apostar por una excursión de varios días desde Marrakech. Si quieres descubrir el Sáhara es tu mejor opción. Eso sí, ten cuidado cuando elijas la empresa para la excursión, encontrarás algún precio más barato, pero no siempre las opiniones las respaldan.
- Desierto de Merzouga en tres días: con una primera noche en Valle de Dades, el viaje pase por Ouarzazate, pero su punto más importante es la noche en el desierto. Ten en cuenta que la vuelta es del tirón, casi 10 horas.
- Precio por persona: desde 150 €
- Desierto de Merzouga en cuatro días: similar a la anterior, pero al volver se añade una noche en Ouarzazate. es una buena alternativa si quieres evitarte la paliza de minibús.
- Precio por persona: desde 225 €
- Desierto de Zagora en dos días: situado a solo seis horas es una gran alternativa a Merzouga si dispones de menos tiempo. Incluye paradas en Ouarzazate y la Kasbah Ait Ben Haddou.
- Precio por persona: 89 €
- Monte Toubkal en dos días: si eres fan del trekking puedes optar por esta ruta para conocer el pico más alto de Marruecos a 4100 metros de altura. Eso sí, ten en cuenta que necesitas estar en buena forma, las caminatas de cada día duran entre 6 y 9 horas.
- Precio por persona: 190 €
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